Asbesto, la masacre silenciosa continúa: Italia primero en Europa con 7 mil muertes al año, escuelas y hospitales aún contaminados

Hoy, en el Día Mundial en memoria de las víctimas del asbesto, el dolor se mezcla con el silencio de aquellos que ya no pueden contar. Soy Más de 200,000 muertes estimadas cada año en el mundosegún la ONU. Una figura impresionante, y ampliamente subestimada, porque muchos estados simplemente eligen no ver, no contar, no registrar.

En Italia, primero en Europa por el número de muertes causadas por la exposición al asbesto, la herida aún está abierta: 7,000 muertes solo en el último año. Caras, historias, familias rotas. No números abstractos, sino una masacre moderna escondida detrás de la normalidad de las escuelas, hospitales, casas.
El asbesto, oficialmente prohibido en Italia desde 1992, en realidad no ha prohibido a Italia.

«Este día no es solo memoria. Es un grito. Es una referencia a la responsabilidad, la remediación, la justicia», denuncia a Ezio Bonanni, presidente delObservatorio Nacional de Asbesto (ONA). «Ya no es aceptable que las ganancias y el lobby ralentizan una recuperación vital para nuestro país».

Según la ona, en Italia hay sobre 1 millón de sitios y micro sitios con asbestopero los oficialmente censurados son solo 100,000. Se han eliminado los millones de metros cuadrados de techos y cubiertas en fibras asesinas, 40 millones de toneladas de materiales contaminados que han estado esperando, durante décadas, se han eliminado.

En las escuelas, en los hospitales, incluso en la guardería, aún puede respirar polvo de asbesto. Mientras tanto, llegan nuevos diagnósticos: cuatro nuevos casos de mesotelioma entre maestros solo en las últimas semanas.

El mapa oculto de la tragedia

Detrás de cada estadística, hay una cara. Una familia. Un vacío que se amplía.

Solo en 2024, en Italia, más de 2,000 personas recibieron un diagnóstico de mesotelioma, un cáncer despiadado que deja pocas posibilidades: 93% de mortalidad en cinco años. Junto a ellos, otros 4,000 han desarrollado un cáncer de pulmón para respirar al polvo de asbesto: casi nueve de cada diez no excederán el período de cinco años. Y nuevamente, 600 nuevas víctimas de asbestosis, una enfermedad que asfixia lentamente a los pulmones. Y más de 10,000 casos de placas pleurales, fibrosis, inspecciones: condiciones que no siempre matan de inmediato, pero que marcan la vida para siempre.

Aún así, estos números solo dicen una parte de la verdad.
Porque solo se cuentan algunas enfermedades en las estadísticas oficiales de la ONU, ignorando la larga ola de asbesto: tumores de la laringe, faringe, estómago, colon, ovarios.
Un catálogo de terror que la ciencia ha documentado (IARC) pero que a menudo no queremos ver.

Y mientras se acumulan las muertes, bajo nuestros pies, una red de agua en ruinas fluye: 300,000 kilómetros de tuberías hechas con cemento de asbesto. Invisible, pero potencialmente letal.

Italia rota por asbesto

No todas las regiones sufren de la misma manera.
En Lombardíase han registrado más de 2,000 muertes en un año, medio mil solo para mesotelioma.
Sigue el Piedmontcon aproximadamente 1,000 muertes, mientras Emilia-Romagna (660), Liguria (600) E Lazio (500) Se confirman otros brotes de dolor.

Sin embargo, hay signos de esperanza. Algunas regiones se están moviendo: Lombardy guía la recuperación con más de un tercio del total nacional, el Friuli Venezia Giulia Se destaca como un modelo virtuoso que había pagado más de 18 millones de euros por intervenciones de eliminación de 2017 a 2023, mientras que para el período de tres años 202-2026 se asignaron 2.8 millones de euros adicionales.
Pero el resto del país organiza, aplastado por la burocracia, deficiencias de fondos, indiferencia política.

Los límites de una batalla global

Más de treinta años después de la prohibición del asbesto en Italia, el mundo permanece peligrosamente dividido.
Solo 62 naciones han prohibido el asbesto.
Rusia, India, China, tres gigantes baratos, continúan produciéndolo, vendiéndolo e incluso exportándolo.
Entonces sucede que los aviones con componentes de asbesto navegados en nuestros aeropuertos, dispersando fibras invisibles en la pista. Y que los bienes contaminados aún cruzan nuestros límites.

Hoy, nuestros pensamientos van al «caído invisible» del asbesto, recordando que cada edificio de recuperación, cada kilómetro de la red de agua restaurada, cada elemento que se eleva contra el silencio puede salvar vidas.

Fuente: www.aconcagua.lat

Noticia completa